2. Tobías  

Publicado por Oliver Luk

Para asimilar todo lo que había pasado, me había aislado del mundo durante dos días. No quería saber cuánto modificaba mi vida lo que había sucedido, y me encerré hasta encontrar una forma de enfrentarme a la nueva situación.

Sentía que mi amistad de cheque en blanco con Tobías tenía un límite, que era Ana, y que lo había cruzado. No sólo era la situación de que lo había hecho, sino más bien cómo.

Cuatro días atrás, dio un espectáculo vergonzoso y aberrante delante de todos. Abusó de las emociones que Ana sentía sobre él hacía tiempo atrás y decidió dar un paso adelante, pese a que veinte minutos atrás estaba en pleno histeriqueo con Susana, con quien se acostó tres días antes.

- Hay dos Tobías en mi cabeza en este momento - le dije, esa siesta cuando no dejé que descanzara antes de ir a su trabajo de nuevo. - Mi mejor amigo y el imbécil ebrio del sábado pasado. ¿Te das cuenta de todo lo que hiciste? Sabías bien lo que ella sentía por ti, sabías bien que veinte minutos atrás te escribías con Susana y sabías bien cuál era mi posición al respecto. Siento que borraste todo lo que habíamos hablado y por un impulso quisiste meter la pata. Y vengo a hablar contigo porque me encuentro en pleno debate sobre si abrazarte o romperte la cara.

Tobías permaneció serio, como intentando encontrar la fórmula para poder defenderse de mis conclusiones.

- Tienes razón - finalmente dijo. - Entiendo tu postura, pero quiero que sepas que lo que siento por Ana es real. Aparte, yo creo que tú me conoces, y tú sabes que no soy un hijo de puta que se aprovecha de la situación.

Tenía que reconocer que si bien no había meditado esa faceta, era una postura cierta. Siempre supe que era el ser humano perfecto para Ana. Perfecto para todo, en realidad.

- Y ahora tengo bronca, porque tu forma de verme va a cambiar, y yo quiero que todo siga perfecto, como hasta ahora.

Tuve un impulso de abrazarlo, como si me sintiera culpable de provocarle daño. Pero imaginé que iba a quedar algo contradictorio de mi parte.

- Haré mi mejor esfuerzo para eso. Me quedará el recuerdo de esa noche, pero las cosas de nuestra amistad son totalmente positivas. No sería tan estúpido de echar a perder una de las pocas cosas sagradas que tengo.

Aunque, confiezo, miles de veces tuve la oportunidad. Aunque Tobías jamás lo supo.

This entry was posted on 20:47 and is filed under .